Division Horizontal

La división horizontal es un proceso legal que permite subdividir un inmueble en propiedades independientes, facilitando su venta o administración de forma separada. Exploraremos en detalle qué es la división horizontal y cómo se tramita en España.

¿Qué es la división horizontal?

La división horizontal es un procedimiento legal que permite la subdivisión de un inmueble en varias propiedades independientes, conocidas como unidades o elementos privativos. Cada una de estas unidades tiene su propio acceso y puede ser vendida o administrada de forma separada. La división horizontal es especialmente común en edificios de viviendas, donde cada piso o apartamento se convierte en una unidad privativa.

Beneficios de la división horizontal

La división horizontal ofrece varios beneficios tanto para los propietarios como para la gestión de los inmuebles. Algunos de los beneficios más destacados son:

• Permite la venta individual de cada unidad privativa: Al subdividir el inmueble en propiedades independientes, cada una de ellas puede ser vendida de forma separada, lo que facilita la venta y permite obtener un mayor valor económico.
• Facilita la administración y gestión de los inmuebles: Al tener cada unidad privativa su propio acceso y ser administrada de forma separada, se simplifica la gestión y se evitan conflictos entre los propietarios.
• Permite la constitución de comunidades de propietarios: La división horizontal implica la creación de una comunidad de propietarios, lo que permite establecer normas de convivencia y gestionar de forma conjunta los espacios comunes.
• Proporciona mayor flexibilidad para la utilización de los espacios: Al tener cada unidad privativa su propio acceso, los propietarios tienen mayor libertad para utilizar y modificar los espacios según sus necesidades.

¿Cómo se tramita la división horizontal en España?

El proceso de tramitación de la división horizontal en España implica una serie de pasos legales y administrativos. A continuación, detallaremos cada uno de ellos:

1. Obtención de autorizaciones administrativas

Antes de iniciar el proceso de división horizontal, es necesario obtener las autorizaciones administrativas correspondientes. Esto implica presentar la documentación requerida ante el Ayuntamiento o la Comunidad Autónoma, dependiendo de la ubicación del inmueble. Es importante cumplir con los requisitos establecidos por la normativa urbanística y obtener los permisos necesarios para llevar a cabo la división.

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2. Aprobación de los propietarios

Una vez obtenidas las autorizaciones administrativas, es necesario contar con el consentimiento de todos los propietarios del inmueble. Esto implica convocar una junta de propietarios, donde se presentará el proyecto de división horizontal y se solicitará su aprobación. Es importante que todos los propietarios estén de acuerdo con la división y firmen el acta correspondiente.

3. Escrituración ante notario

Una vez obtenidas las autorizaciones administrativas y la aprobación de los propietarios, se procede a la escrituración de la división horizontal ante notario. En este paso, se redacta la escritura pública que establece las nuevas propiedades independientes y se establecen las normas de régimen interno que regirán la comunidad de propietarios.

4. Inscripción en el Registro de la Propiedad

Para otorgar seguridad jurídica a los propietarios, es necesario inscribir la división horizontal en el Registro de la Propiedad. Esto implica presentar la escritura de división horizontal y los demás documentos requeridos ante el Registro correspondiente. Una vez inscrita, la división horizontal tiene plenos efectos legales y los propietarios pueden ejercer sus derechos sobre las unidades privativas.

Requisitos y documentos necesarios

Los requisitos y documentos necesarios para tramitar la división horizontal pueden variar dependiendo de si se trata de un edificio de nueva construcción o de un inmueble existente. A continuación, mencionaremos algunos de los requisitos más comunes:

Para edificios de nueva construcción

• Proyecto de división horizontal redactado por un técnico competente.
• Licencia de obra para llevar a cabo la separación física del inmueble.
• Certificado final de obra que acredite la finalización de la construcción.
• Certificado de eficiencia energética de cada una de las unidades privativas.
• Planos actualizados del inmueble y de las nuevas unidades privativas.

Para inmuebles existentes

• Escritura de propiedad del inmueble.
• Certificado de deudas y cargas del inmueble.
• Consentimiento de todos los propietarios del inmueble.
• Planos actualizados del inmueble y de las nuevas unidades privativas.

Gastos asociados a la división horizontal

La tramitación de la división horizontal conlleva una serie de gastos que deben ser tenidos en cuenta. Algunos de los gastos más comunes son:

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• Separación física del inmueble: Los costos asociados a la separación física del inmueble pueden variar dependiendo de las características del mismo. Esto puede incluir la construcción de tabiques, la instalación de puertas y la adaptación de las instalaciones comunes.
• Licencia de obra: Para llevar a cabo la separación física del inmueble, es necesario obtener una licencia de obra. Los costos de esta licencia pueden variar dependiendo del municipio y de la envergadura de la obra.
• Honorarios del notario: La escrituración de la división horizontal ante notario implica el pago de honorarios profesionales. Estos honorarios pueden variar dependiendo del valor del inmueble y de la complejidad del proceso.
• Inscripción en el Registro de la Propiedad: Para otorgar seguridad jurídica a los propietarios, es necesario inscribir la división horizontal en el Registro de la Propiedad. Los costos de esta inscripción pueden variar dependiendo del valor del inmueble y de las tarifas establecidas por el Registro correspondiente.

Diferencia entre división horizontal y segregación

Es importante diferenciar la división horizontal de la segregación, ya que son dos conceptos distintos:

• División horizontal: En la división horizontal se crean nuevas propiedades independientes a partir de un inmueble. Cada una de estas propiedades tiene su propio acceso y puede ser vendida o administrada de forma separada. La división horizontal implica la subdivisión del inmueble en unidades privativas y la constitución de una comunidad de propietarios.
• Segregación: En la segregación se separa una parte de la propiedad matriz del resto del inmueble. En este caso, no se crean nuevas propiedades independientes, sino que se establece una nueva delimitación de la propiedad. La segregación puede ser útil, por ejemplo, cuando se quiere separar un local comercial del resto del edificio.

La división horizontal es un proceso legal que permite subdividir un inmueble en propiedades independientes, facilitando su venta o administración de forma separada. Para tramitar la división horizontal en España, es necesario obtener autorizaciones administrativas, contar con el consentimiento de los propietarios, realizar una escritura pública y inscribir la división en el Registro de la Propiedad. Los gastos asociados a la división horizontal incluyen la separación física del inmueble, la licencia de obra, los honorarios del notario y los costos de inscripción en el Registro de la Propiedad. Es importante diferenciar la división horizontal de la segregación, ya que en la primera se crean nuevas propiedades independientes, mientras que en la segunda se separa una parte de la propiedad matriz del resto del inmueble.

Preguntas Frecuentes|FAQ

1. ¿Cuál es el objetivo de la división horizontal?

La división horizontal tiene como objetivo principal subdividir un inmueble en propiedades independientes, permitiendo su venta o administración de forma separada. Esto facilita la gestión de los inmuebles y brinda mayor flexibilidad en su utilización.

2. ¿Cuáles son los beneficios de la división horizontal?

La división horizontal ofrece varios beneficios, entre ellos:

• Permite la venta individual de cada unidad privativa.
  

• Facilita la administración y gestión de los inmuebles.
  

• Permite la constitución de comunidades de propietarios.
  

• Proporciona mayor flexibilidad para la utilización de los espacios.

3. ¿Cuáles son los pasos para tramitar la división horizontal en España?

Los pasos para tramitar la división horizontal en España son:
1. Obtención de autorizaciones administrativas.
2. Aprobación de los propietarios.
3. Escrituración ante notario.
4. Inscripción en el Registro de la Propiedad.

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4. ¿Qué requisitos y documentos son necesarios para la división horizontal?

Los requisitos y documentos necesarios pueden variar según si se trata de un edificio de nueva construcción o de un inmueble existente. Algunos de los requisitos comunes son:

• Proyecto de división horizontal redactado por un técnico competente.
  

• Licencia de obra (en caso de edificios de nueva construcción).
  

• Escritura de propiedad del inmueble.
  

• Consentimiento de todos los propietarios.
  

• Planos actualizados del inmueble y de las nuevas unidades privativas.

5. ¿Cuáles son los gastos asociados a la división horizontal?

Los gastos asociados a la división horizontal pueden incluir:

• Separación física del inmueble.
  

• Licencia de obra.
  

• Honorarios del notario.
  

• Costos de inscripción en el Registro de la Propiedad.

6. ¿Cuál es la diferencia entre división horizontal y segregación?

La diferencia entre división horizontal y segregación radica en que en la primera se crean nuevas propiedades independientes a partir del inmueble, mientras que en la segunda se separa una parte de la propiedad matriz del resto del inmueble. La división horizontal implica la subdivisión del inmueble en unidades privativas y la constitución de una comunidad de propietarios, mientras que la segregación establece una nueva delimitación de la propiedad sin crear nuevas propiedades independientes.

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